Me Gradué Hace 3 Años: ¿Por Qué Estoy Aprendiendo Fotografía de Nuevo?

by - August 25, 2019

Llevo algunas semanas re-aprendiendo técnicas de fotografía y de edición de fotos como si estuviera aprendiendo desde cero. Hace tres años recibí mi título de Técnico Superior Universitario en Ciencias Audiovisuales y Fotografía y este año decidí empezar de 0 de nuevo, ¿por qué?





LA HISTORIA 

 A principios de este año perdí mi cámara réflex por un ataque de hormiguitas que decidieron hacerse una casa adentro. Estaba devastada. Primero porque no entendía como pasó lo de las hormigas y segundo porque estaba pasando por un momento económico muy difícil y no tenía el dinero ni para mandarla a reparar ni para comprar una nueva. 

Vayamos más atrás en esta historia. Siempre amé la fotografía y soy muy buena con lo que sea producción audiovisual. Disfrute mis años de carrera universitaria y no me parecieron difíciles en absoluto. Un sueño. Quedé embarazada el año que terminé la universidad. En Febrero ya estaba solvente y lista para no regresar más a la institución y poco después quedé embarazada. 

Cuando tuve a mi hijo, tuve que cambiar el lugar de prioridades de algunas cosas. Dejé mi carrera a un lado, aunque en ese momento no tenía sueños definidos en realidad, y decidí enfocarme en mi familia: mi bebé y mi novio. Needless to say, adelantando unos años, las cosas no salieron como yo me lo imaginaba. Me separé de mi ex-novio y tuve que aprender de nuevo a ser yo. 


 Quiero decir que... No es un cuento para que se asusten con la maternidad, porque cada realidad es diferente. Y aunque muchas mamás hacen lo que yo hice, no quiere decir que sea tu realidad. No tienes que sacrificar la maternidad por tu carrera, ni viceversa. Ese es el punto de esta historia. 

Una vez me separé, comencé un proceso bastante personal de re descubrimiento. Ya no tenía excusas para no hacer las cosas que yo quería hacer. Mi ex siempre intentaba motivarme para que yo saliera de mi zona de confort que se había convertido la maternidad para mi, pero yo siempre encontraba excusas para no hacerlo. Cuando nos separamos y me vi en la situación de que nadie iba a velar por mi y que tenía que ser suficiente para mi hijo y para mi, me topé con una pregunta importante: ¿y ahora qué hago?




Pasé los primeros meses después de la separación enfocada en que necesitaba dinero para mantener al enano, pero eso no funcionó. Tuve muy pocos trabajos y no eran suficiente como para ahorrar. Ese diciembre fue muy difícil para mi porque tuve que aceptar que no podría comprarle regalos de navidad a mi hijo y le delegué la tarea al padre. Que de todas maneras lo iba a hacer, tengo la suerte de que mi ex es un buen padre,  pero cuando nos separamos, yo decidí que quería hacer suficiente dinero como para mantenernos bien sin necesidad de otra ayuda, si la ayuda llegaba excelente, la aceptaría pero no quería vivir esperando a que alguien nos ayudara, quería ser capaz de proveer todo y cuando no pude hacerlo, fue un golpe fuerte para mi ego. 


LA LECCIÓN...

En enero de este año seguí con mi proceso de re descubrimiento, pero entendí que ya no podía hacerlo desde el enfoque del dinero, sino más bien desde lo que yo quería o me gustaba hacer. Conseguí una solución temporal, trabajando como freelancer en algo que me gustaba y que me daba suficiente como para proveer para los dos sin problema pero era una solución temporal igual que en algún momento iba a terminar. 

Tuve la oportunidad de tener algunos ahorros con el trabajo que hice a principio de año, pero tuve unos meses con una situación de salud difícil y todos mis ahorros se fueron en medicinas y consultas médicas. Y así fue como recientemente, otra vez me quedé sin nada y me tocó empezar de nuevo otra vez. Oh, cest la vie. 

Ya había pasado medio año y a esta freelancer le tocó reinventarse de nuevo. Conseguí el dinero y pude pagar la reparación de la cámara. Pero esta vez surgió de nuevo la pregunta: ¿ahora qué hago?

La primera vez, me enfoqué sólo en hacer dinero. No funcionó. 
La segunda vez, me enfoqué en “resolver rápido”. Funcionó pero de forma temporal. 
Ahora esta tercera vez tenía que ser algo diferente a las otras dos. ¿Qué tal si esta vez me enfoco en hacer lo que en verdad haga a mi alma feliz?


¿DÓNDE ESTOY?

Aquí es en donde estoy. Por primera vez dejé el dinero a un lado, por ahora, sé que llegará en algún momento. Pero estoy enfocada en ser, crear y hacer lo que siempre he querido. 

Aquí es en donde el titulo del post tiene sentido, porque decidí aprender de nuevo fotografía. No de nuevo de nuevo, porque hay clases, leyes y normas que a uno jamás se le olvidan, pero más bien empecé a aprender cómo hacer la fotografía que a mi siempre me había gustado y jamás me había animado a hacer. 

Siempre he dicho que el internet es un lugar maravilloso porque hay gente enseñando cosas útiles. He aprendido técnicas de gente menor que yo pero que saben y enseñan. Me he sentado a trabajar en Lightroom de forma real y a entender y crear mis propios presets. Que debí haber aprendido hace años pero no lo hice. Aquí estoy, aprendiendo y disfrutando el proceso de nuevo. 

Nunca es tarde para empezar a hacer lo que te haga feliz, especialmente si estás perdido. Es loco, pero a veces regresar a las cosas que nos hacían felices de niños pueden ayudar a nuestra salud mental, creando un impacto positivo en nuestras vidas. 

Estos meses descubrí que me encanta aprender, crear y ayudar a otros. Tal vez ésa sea mi misión en la vida. Muchas veces traté de hacer las cosas como los demás las hacían o como me decían que las hiciera para que funcionara, pero lo que les funcionaba a otros no me daban resultados a mi. 

Estoy aprendiendo y probablemente me equivoque mil veces más pero aquí estoy, enfocada en hacer lo que me haga feliz. Estoy plantando las semillas que posiblemente me traigan la vida que siempre he querido tener porque la estoy creando yo misma. Trabajando en mí y aprendiendo. 



You May Also Like

0 Comments